El entrenamiento isocinético es un revolucionario método de entrenamiento con el que pueden lograrse resultados más efectivos y en menor tiempo que con el entrenamiento clásico. A diferencia de las máquinas de fuerza clásicas, en el entrenamiento isocinético no se ajusta ningún peso, sino una velocidad de movimiento. La resistencia resulta entonces del intento de entrenar más rápidamente de lo que lo permite la velocidad de la máquina. En este sentido, las máquinas de entrenamiento isocinéticas poseen una cualidad similar al agua. Cuanto más rápido se intenta presionar o tirar, mayor es también la resistencia. Esto significa que uno mismo puede controlar la dosis de carga en cualquier momento del ejercicio y supervisar la carga aplicada en la pantalla de la máquina. El entrenamiento isocinético es una forma particularmente cuidadosa de entrenamiento de fuerza y, por ello, también idónea como entrenamiento regenerativo. El entrenamiento isocinético, como forma de entrenamiento suave para las articulaciones, es idóneo para fisioterapia, ejercicio terapéutico en la máquina y entrenamiento de rehabilitación. El entrenamiento isocinético hace posible un desarrollo de la fuerza uniforme en cualquier ángulo de articulación. Los músculos no pueden aplicar siempre la misma fuerza, sino que la fuerza del músculo depende de la posición en la que se encuentre en ese momento. Al contrario que en el entrenamiento isocinético donde el estímulo de entrenamiento es igual en todos los ángulos de articulación.