Los ejercicios de bajo impacto son una oportunidad maravillosa para ponerse en movimiento y una excelente manera de que los principiantes empiecen un programa de ejercicio.
El riesgo de lesiones es muy bajo, y es más probable que se mantenga la constancia y que el ejercicio se convierta en una práctica diaria.
En lugar de correr o saltar, algunas actividades como caminar, andar en bicicleta y nadar pueden estimular la capacidad cardiovascular y mejorar la salud del corazón.
Si quiere desarrollar la fuerza, pruebe a hacer ejercicios de bajo impacto, como yoga, remo y entrenamiento de fuerza.
Este tipo de ejercicios puede ayudarle a fortalecer los músculos y mejorar la flexibilidad sin forzar demasiado las articulaciones.
Algunos ejercicios de bajo impacto son caminatas, natación, bicicleta, remo, yoga y entrenamiento de fuerza.
Caminar es un ejercicio de bajo impacto popular, y por algo lo es.
Al nadar, ejercita todo el cuerpo y, al mismo tiempo, no fuerza las articulaciones.
Ya sea que use una bicicleta fija dentro de casa o que salga a pedalear al aire libre, hará un ejercicio maravilloso que además es respetuoso con las rodillas, tobillos, cadera y espalda.
Es una forma de ejercicio cardiovascular de bajo impacto que también trabaja los músculos, incluidos los hombros, los brazos y la espalda.
Con una serie de posturas y ejercicios de respiración, el yoga puede mejorar la mental y el estado físico.
Practicar yoga con regularidad ayuda a desarrollar la fuerza, el equilibrio y la flexibilidad con muy poca tensión en las articulaciones.
Levantar peso puede tener muchos beneficios para la salud, como el aumento de la masa muscular y el desarrollo de huesos más fuertes.
Las pesas, las bandas de resistencia y las máquinas con peso son algunas opciones para hacer buenos ejercicios de bajo impacto.
Empiece poco a poco y aumente gradualmente la resistencia o el peso a medida que el ejercicio le resulte más fácil.
No importa qué ejercicios de bajo impacto elija, siempre tenga presente la seguridad.