Un entorno flexible es un espacio de trabajo que se adapta a las necesidades de los empleados y la empresa, ofreciendo flexibilidad en la ubicación, el mobiliario y los servicios. La oficina flexible tiene como objetivo ofrecer al trabajador la opción de elegir un espacio más cómodo, relajado y funcional para su labor. Estos espacios se caracterizan por ser motivadores y cuentan con tecnología móvil y virtual necesaria, para que puedan realizar el trabajo o llevarlo a cualquier lugar. La oficina flexible se adapta a ti y a tus necesidades, cubriendo lo que necesitas, y permite llevar a cabo las actividades empresariales ofreciendo numerosas ventajas sobre las oficinas convencionales. La temporalidad es una de las grandes diferencias entre oficinas flexibles y oficinas tradicionales, ya que las oficinas flexibles se contratan dependiendo de las necesidades de la empresa. Un entorno de trabajo flexible implica la creación de un lugar de trabajo colaborativo, utilizando mobiliario flexible y multiuso, y no atar a las personas a los escritorios. Los escritorios de pie y un personal de oficina más móvil te dará el espacio que necesita para ser más flexible con su espacio de oficina. La creación de zonas productivas de trabajo, mesas amplias para varios trabajadores, y una zona de ocio donde desconectar y tomar un café sin tener que salir a la calle, son algunas ideas para crear una oficina más flexible.