Para tener una cocina libre de toxinas es importante considerar no solo los alimentos que se consumen, sino también los instrumentos con los que se cocinan y los productos de limpieza utilizados.
La importancia del producto que utilizamos para limpiar nuestra cocina antes de manipular los alimentos radica en que si no vigilamos, al alimento le agregamos los restos de sustancias tóxicas de los productos de limpieza, y los tóxicos del material del recipiente con el que cocinamos.
Algunos materiales de los instrumentos para cocinar que NO deben pisar nuestra cocina son los plásticos y el tritán.
Es importante tener cuidado con el uso consciente de los materiales y su interacción con los alimentos, ya que algunos materiales pueden transferir sustancias químicas a los alimentos.
Una opción segura para envasar los alimentos es utilizar recipientes de vidrio, y es importante seguir indicaciones de cómo guardar los alimentos en estos recipientes.
Los cubiertos con los que comemos también deben ser inocuos, y algunos materiales como el 316Ti y el vidrio borosilicato son seguros para cocinar.
Es importante establecer prioridades para ir haciendo los cambios poco a poco y no desistir en el camino hacia una cocina libre de toxinas.
Algunos de los peores materiales para cocinar son los plásticos y otros materiales que pueden transferir sustancias químicas a los alimentos.
El vinagre y el bicarbonato pueden ser utilizados como sustituto principal para la mayoría de productos de limpieza de tu hogar, y es importante enjuagar bien después de limpiar.
No se deben comprar productos que tengan ingredientes perjudiciales o difíciles de entender en la etiqueta.
En última instancia, lo ideal es fijarse en los ingredientes que sí queremos en nuestra vida, tener todo lo más saludable posible, y evitar así que haya una acumulación de tóxicos.